Acmella oleracea. Una vez al día para estimular la actividad estomacal y fortalecer el sistema inmune

Acmella oleracea. Una vez al día para estimular la actividad estomacal y fortalecer el sistema inmune

La Acmella oleracea es una especie botánica de planta con flor de la familia de las Asteraceae, también conocida como hierba de los dientes debido a que sus hojas poseen agentes analgésicos empleados a veces para aminorar el dolor de dientes.

Actualmente tanto sus hojas como su flor, están ganado un lugar en el ambiente culinario. Para los usos culinarios se emplea sólo una pequeña parte de las hojas y proporciona un sabor único en las ensaladas. Las hojas cocinadas pierden su fuerte sabor y puede ser empleada como una verdura de hoja. Tanto fresco como cocinada se emplea en la gastronomía de Brasil. Se trata de una pequeña planta que crece rápidamente, con inflorescencias rojas. Debido a su sensibilidad a las heladas crece sólo en los climas templados.

Al masticar un poco de la flor o de las hojas, se comienza a sentir un picor ligero en el paladar y la lengua, continúa un hormigueo que se convierte en adormecimiento, el cual tarda algo en desvanecerse. Esta es la forma más directa de disfrutar de las propiedades de la flor.

La flor deshidratada se emplea como pimienta. También se puede trocear para aplicarla sobre carnes, gazpachos y en la preparación de helados de frutas, lo cual proporciona un sabor refrescante. En esta presentación, también es utilizada como acompañante de vinos y cócteles. Para la preparación de ensaladas, las hojas pueden utilizarse en su forma natural o pasadas por agua hervida.

Sus beneficios son:

Gracias al espilantol presente en toda la planta, esta posee propiedades anestésicas, vasodilatadores, antimicrobianas, y antioxidantes.

La flor así como las hojas, son empleadas para tratar afecciones bucales y de la garganta. También son empleadas en el tratamiento de la tuberculosis, cálculos biliares y enfermedades pulmonares.

Por otro lado, gracias a su acción anestésica son utilizadas comúnmente para aliviar los dolores de muela. También son empleados para combatir la anemia, dispepsia, escorbuto, la obesidad, cándida (hongos) y para estimular la actividad estomacal. Así mismo, fortalecen el sistema inmunológico (se compone de una red de células, tejidos y órganos que trabajan en conjunto para proteger al cuerpo. Las células mencionadas son glóbulos blancos (leucocitos) de dos tipos básicos, que se combinan para encontrar y destruir las sustancias u organismos que causan las enfermedades), el sistema linfático, funcionan como insecticida y como diurético.

Los comentarios están cerrados